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La ciencia contemplativa como herramienta de transformación social

Seguimos creciendo  e inspirándonos unos a otros con nuestra investigación interna y nuestro deseo de aportar a los demás.  Compartimos con todos vosotros las reflexiones de las últimas semanas relacionadas con la conexión ciencia y budismo.

En las últimas décadas la ciencia ha desarrollado un creciente interés en la investigación y divulgación de la meditación y sus beneficios.

De hecho, en la actualidad se puede acceder a cursos y talleres, bajo la tutela de las Universidades, que ofrecen la práctica de la atención plena (mindfulness) con el objetivo de reducir el estrés, cultivar la empatía o desarrollarcompasión.

El auge e interés de estas propuestas está permitiendo que muchas personas estén involucrándose en la práctica de la meditación. A priori, ¡esta es una buena noticia!

Durante siglos las tradiciones contemplativas (Budismo, Taoísmo, Hinduismo, Sufismo,…) han transmitido una gran cantidad de técnicas de introspección con una perspectiva trascendente, un viaje más allá del bienestar personal. De estas técnicas se nutre ahora la ciencia para su investigación.

Como hipótesis de trabajo, podemos plantear que tanto la ciencia moderna como las tradiciones contemplativastienen como objetivo  ayudar a los seres humanos a vivir una vida más saludable y equilibrada, tanto interna o externamente, aportando felicidad y bienestar a nuestras vidas y al planeta.

Desde este punto de vista y ante los retos que nos enfrentamos como humanidad, surge un cuestionamiento interesante ¿puede el momento actual ser propicio para que ciencia y tradiciones contemplativas cooperen para mejorar las vidas de los seres vivos y de la Tierra?

Desde la tradición budista, es preciso generar una ética que proteja la felicidad y el bienestar de los seres sintientes  así como un compromiso de implicarnos en la erradicación del sufrimiento. Este es el contexto imprescindible, de nuestra acción para divulgar y expandir las técnicas de meditación. Desarrollar atención plena para reducir nuestro sufrimiento y mejorar nuestra capacidad de disfrute es un buen objetivo, pero tiene que ir acompañado del compromiso de potenciar nuestra capacidad de ser más benéficos y compasivos para uno mismo, los demás y nuestro entorno.

Cómo investigadores en la meditación surgen incontables cuestionamientos para abordar desde la calma mental.

¿Para qué meditar? ¿Conocemos realmente la verdadera potencialidad de las técnicas de meditación? ¿Puede el materialismo verse influenciado positivamente por la trascendencia? ¿Estamos preparados para los retos del siglo XXI con respecto a despertar conciencia? ¿Cómo dotarnos de amor, compasión y ecuanimidad para superar estos retos?

¡Sigamos nuestra investigación!

Artículo de interés: Más Allá del McMindfulness, por Ron Purser y David Loy

El siguiente video muestra como la ciencia contemporánea progresivamente constata la relevancia positiva de la meditación (mindfulness) en el bienestar y felicidad de las personas que la practican. Esa constatación científica está extendiendo su uso como técnica terapéutica y como vía al crecimiento y bienestar para un número cada vez mayor de personas en el  mundo occidental.

Sin embargo, a menudo se interpreta ese bienestar solamente en términos personales individuales. A menudo se olvida la dimensión de la ética y los valores.

La meditación combinada con la ética y los valores de búsqueda de la felicidad de los demás se convierte en un poderoso instrumento que nos puede hacer más felices y hacer también más felices a los otros. De ahí que junto a la perfección en la meditación lo importante es también la perfección en el amor a los demás.

La ética budista tiene como ejes básicos no dañar a ningún ser vivo y el amor universal indiscriminado. Normalmente se presentan como cinco preceptos guía y se consideran la práctica ética básica de los budistas:

Con acciones bondadosas, purifico mi cuerpo

Me comprometo a no tomar la vida de nadie.

Con generosidad sin límite, purifico mi cuerpo

Me comprometo a no tomar lo que no me pertenece.

Con tranquilidad, sencillez y contento, purifico mi cuerpo

Me comprometo a no tener una conducta sexual dañina.

Con comunicación veraz, purifico mi habla

Me comprometo a no decir mentiras.

Con conciencia clara y lúcida, purifico mi mente

Me comprometo a no consumir intoxicantes.

La meditación en combinación con esos principios éticos forma un poderoso instrumento de mejora y bienestar de las sociedades en que vivimos. Es Budismo en Sociedad y para la Sociedad.

GIM Senior.

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